lunes, 24 de marzo de 2014

Una noche en el infierno Parte 03 - Rodolfo Medrano García

Parte III: El Leproso
Jacinto tenia 24 años cuando le diagnosticaron lepra, poco a poco su mundo se desintegraba, su familia, su casa, su trabajo, hasta que un buen día se despertó en un rincón de un viejo edificio que antes fue un gran estacionamiento, solo, hambriento, lacerado por la lepra lo había transformado en un ser hosco, violento e insensible.
A pesar de que se negaba a ser ayudado su familia lo asistía lo mejor que podían, su esposa le llevaba regularmente de comer y los pocos medicamentos que su precaria economía les permitía, Fani tiene dos hijos con el: Miguel que se encuentra estudiando el cuarto año de Economía y Gloria quien tiene ya dos años ejerciendo como medico en un respetado hospital, en ella recae la responsabilidad de atenderlo, limpiarlo y suministrar los medicamentos para amortiguar el dolor pero había días en que gritaba como un loco y en ocasiones perdía la conciencia.
Así pasaban los días y a pesar de que por unas pocas horas que pasaba con su familia, la mayor parte del tiempo se encontraba solo, acostumbraba a deambular por el estacionamiento, nadie se le acercaba, los demás indigentes lo miraban con cierto temor y desprecio por sus arranques de ira, tendía a gritarles, maldiciéndoles y en ocasiones les arrojaba piedras para alejarlos.
Nadie parecía entender su extraño comportamiento, ni su propia familia pero entre su soledad y su enfermedad lo había llevado a un mundo imaginario donde se veía como un hombre de éxito, se imaginaba en un mundo donde el vivía en una opulencia digna de un rey, comidas abundantes, vino, mujeres y música, danzaban en su mente, embriagado en un éxtasis que le permitía olvidar su sórdida realidad.
A medida que avanzaba la enfermedad mas se reforzaba en su mundo al grado que se pasaba la mayor parte del día acostado, a Fani le costaba cada ves mas hacerlo despertar, ya no comía como antes, su angustia crecía por que sentía que la lepra al fin lo estaba venciendo, veía con preocupación como su cuerpo se estaba debilitando, entre murmullos ininteligibles lo oía sostener animadas conversaciones con seres imaginarios y de ves en cuando lo ¿veía sonreír? o ¿lo imaginaba?
Desesperada lo zarandeo con tanta fuerza que se despertó sobresaltado e inmediatamente una súbita furia lo invadió por que fue arrancado de golpe de su extraña fantasía, sin parar de gritarle he insultarla, Fani se desplomo agobiada por el dolor y la impotencia por que a pesar del amor y la abnegación con que había cuidado a Jacinto, la seguía maltratando y despreciando, en una acción mecánica Fani tomo un tubo que estaba cerca de la pared y sin vacilar lo golpeo con tanta fuerza que un instante se desplomo, tendido en el piso ya casi agonizando Jacinto alcanzo a decir “Gracias” y expiro, para asombro de Fani vio como su rostro se fue transformando en la imagen apacible de alguien que ha hallado la paz y el descanso que durante mucho tiempo se le negó.
Dice un viejo cuento chino “Que un día un hombre soñó con ser una mariposa y cuando despertó no sabia si era una mariposa soñando con ser un hombre” este extraño cuento retrata lo vívido que son los sueños y que en el caso de esas personas que físicamente están impedidas, la fantasía de los sueños nos permite crear mundos donde podemos conseguir todo lo que la realidad nos a negado, para Fani la muerte de Jacinto fue una liberación de una realidad que la esclavizaba a una persona y para el su muerte fue una liberación de una realidad que lo incapacitaba, al final ambos ganaron su libertad a un alto costo en una noche del infierno.



Comentario del Papa Francisco


Me gusta mucho este comentario, en la vida esta bien sentirse triste por que pasamos momentos así pero debemos seguir adelante